sábado, 23 de febrero de 2019

CORO POLIFONICO DE TALLERES (1952-1960) (I)






antiguo estandarte del Coro




En el pueblo de Astillero desde siempre hubo una gran afición por los coros, como lo demuestra la existencia en aquellos años del Orfeón Astillero-Guarnizo. Con la guerra civil cayó en el olvido y tuvieron que pasar varios años para que se volviese a organizar una agrupación de ese estilo, aunque con distinto nombre.

Fue en el año 1952, cuando con motivo de la jubilación de don Sebastián Altonaga a quien, se le ofreció una cena-homenaje. Allí se encontraron varias personas que habían pertenecido a la antigua coral del municipio, que junto con don Ricardo Gutiérrez, director de Tasa y don Francisco Martinez, cura párroco, propusieron renacer la coral, que ya llevaría el nombre de la empresa astillerense.
La difícil misión de encontrar director fue para Marín y Méndez, dos entusiastas, que dieron con el maestro Sáez de Adana, quien sería el alma principal de la nueva agrupación coral.
Hombre íntimamente vinculado a la música (su padre había sido director de la Banda de Música de Santander y fundador de la Coral Laureada, así como de la Banda de Castro y del Conservatorio de Música de la capital), sería la persona idónea para poner en marcha el grupo.
Pronto comenzaron los ensayos en un local de la empresa y sucesivamente vendrían las actuaciones..
Del Coro Polifónico de Talleres de Astillero, durante su trayectoria musical, podríamos elogiar muchísimas actuaciones de las que han participado y algunas son estas:

El 7 de junio de 1953, la Coral del Grupo de Empresa Talleres del Astillero, que recientemente había sido creado y que era dirigido por don Francisco Sáez de Adana, visitó ese domingo su primera visita artística al Sanatorio de Pedrosa.
Llego a las cuatro y media al Sanatorio e interpretó en sus diversos pabellones las obras "Eres alta y delgada"; "Yo no soy marinero"; "A la romería"; "La mañana"; "In monte Olivetti"; "L'Ampurdá", cuyas interpretaciones fueron muy aplaudidas.
Don Gaspar Muñoz, capellán del Sanatorio, les acompañó a los componentes de la Coral por todas sus dependencias.

El viernes 21 de agosto de 1953, a las 8,30 de la tarde, hora acostumbrada para el ensayo de la Coral de los Talleres del Astillero, se presentó el maestro don Ramón Sáez de Adana para comprobar el grado de perfección alcanzado por la agrupación artística que dirigía su hijo, don Francisco.
Se interpretaron en su presencia varias obras de su creación, como "La mañana", "La romería", etc.
Felicitó calurosamente a la Coral, animándola para proseguir su labor.

El 29 de julio de 1954, el Coro de Talleres del Astillero, bajo la experta batuta del destacado maestro, don Francisco Sáez de Adana y quienes habian logrado un conjunto importante, como se había demostrado en anteriores actuaciones, interpretaron en su debut en la capital,  el siguiente selecto programa, a cuarenta voces.
Era su primera presentación en Santander, con motivo de la Real de la Feria.
Primera parte.- "La mañana", Fabt; "Jovenivola", Millet; "Goitzeco Izarra" canción vasca; Guridi; "Negra sombra", canción gallega, Montes y "L'Ampurdá", sardana, Morera.
Segunda parte.- "A la romería", canción montañesa; Sánchez; "Eres alta y delgada", canción montañesa, R. Sáez de Aldana; "Canto del dalle", canción montañesa, R. Sáez de Adana; "Jota montañesa", canción montañesa", R. Sáez de Adana.

El 22 de agosto de 1954, el Coro Polifónico actuó en el Coliseo Garcilaso.





El domingo 18 de diciembre de 1955, se celebró una fiesta con motivo de la bendición del estandarte del Coro Polifónico del Grupo de Empresa Talleres del Astillero.
A las once de la mañana, se celebró la misa mayor en la parroquia de San José y durante la misma se pudieron escuchar los asistentes al Coro Polifónico, que interpretaron magistralmente, bajo la dirección de don Francisco Sáez de Adana, las obras siguientes:
"Ave Maria" de R. Sáez de Adana; "Ave Verum" de Rillé; "Oye piadoso", de Bortinianzki y "Regina Celi", de Ciro Grassi.
Terminada la misa en los salones del Cinema Pax, tuvo lugar la bendición del estandarte del Coro Polifónico por el párroco, don Francisco Martinez, estando presentes todos los componentes de este coro.
Actuó de madrina la señora Emilia Menéndez de Reina, esposa de don Luis Reina Huerta y de dama de honor,  doña Josefa Llorente, esposa del solista de este coro, don Luis Garcia del Rio.
A continuación de la bendición, don Luis Reina Huerta leyó unas cuartillas en las cuales hizo resaltar la belleza de este arte a todos los asistentes. Le siguió la palabra, don Andrés Navedo Quintanilla, en representación de los componentes de la antigua masa coral Astillero-Guarnizo, cuya bandera se encontraba presente en el escenario, siendo portada por su antiguo abanderado, don Aurelio Ferradas.
Seguidamente el Coro Polifónico, interpretó varias obras de su repertorio.
"Juvenivola", "Negra sombra", "El chénguere", "Goizeko Izarra", "El saltiro de la cardina", "L'Ampurdá", "Canciones rusas", "Eres alta y delgada", "Cura de luna" "El canto del dalle", "El marinero" "La barquera"

El 23 de diciembre de 1956, actuaron en el Cinema Pax, con motivo de la Campaña de Navidad y cuya recaudación fue destinada a los fondos de esta campaña que todos los años se venía organizando.
Magnífica actuación y con más perfección y de mérito, cuando ellos dedicaban precisamente las horas de descanso al termino de su jornada diaria para efectuar los ensayos. Sin dejar de citar a su director, don Francisco Sáez de Adana, por la buena labor que venía realizando con todos esos coralistas.

El 7 de agosto de 1958, actuó con éxito el Coro Polifónico de Talleres del Astillero, en el Auditórium en Santander.
Todas las obras interpretadas por el Coro Polifónico fueron ovacionadísimas y algunas tuvieron que repetirse ante los insistentes aplausos del público, que llenaron ese encantador lugar.

Por mayo de 1959, el Coro Polifónico de Talleres de Astillero se desplazó a Madrid, para actuar en  la I Demostración Sindical de Música y Danza.
Formó parte del grupo especial que cantó las obras escogidas. Para pertenecer a este grupo especial había que demostrar la valía de cada coro.
Para ello, el director de la Coral de Castellón de la Plana, presenció los ensayos de la coral y eligió la obra para la actuación.
Aprovechando la visita a Madrid, actuaron en diversos centros oficiales y en algunas industrias de esa localidad.


Durante esos años (1952-1960), tuvieron otras actuaciones, como fueron en el Cinema Pax, en la Iglesia de San José, en el Auditórium de Santander, en el Festival Internacional de la Plaza Porticada, siempre con mucho éxito.












viernes, 15 de febrero de 2019

SELECCION CANTABRA de juveniles - 1 febrero 1955



(fotos cedidas por el ex-portero Pepín)


Selección Cántabra


Pepín, Vidal
Tomás, Campín






El 1 de febrero de 1955, se jugó en los campos del Rayo, el encuentro entre las selecciones de CANTABRIA y de Asturias.

Dio comienzo el partido a las dos y media, en un campo bastante pesado, por la gran cantidad de arena que cubría para eliminar los charcos de agua que predominaba en este campo.

Se registró una gran entrada para ver a los mejores jugadores juveniles de Cantabria.

Arbitró el encuentro el señor Casal, del Colegio vizcaíno, con líneas de su mismo Colegio.

Los equipos se alinearon así:

Selección Cántabra: Pepín (Astillero); Tomás (Astillero), Domínguez (Madrid), Angel (Racing); Vidal (Astillero), Félix (Racing); Obregón (Racing), Mora (Florida), Santamaria (Racing), Blanco (Rayo) y Campín (Astillero). En el segundo tiempo, Saro (Madrid), sustituyó a Mora.

Selección Asturiana: César; Pilongo, Angel, Moro; Crespo, Oscar; Pica, Quique, Panin, Silvestre y Toni. En el segundo tiempo, Norniella sustituyó a Crespo.

El primer tiempo fue muy competido y con buen juego por ambos equipos.

Destacando la excelente actuación del defensa Domínguez y el extremo izquierda, Toni, de la selección asturiana, quien en dos excelentes jugadas consiguió marcar los dos goles de su equipo.

En la segunda parte, la Selección cántabra, poco a poco, se fue imponiendo hasta dominar a los asturianos.

Los tantos locales fueron así: En el primer tiempo, Santamaria, en jugada personal; Vidal logra el empate de un fortísimo tiro desde fuera del área.

En la segunda parte, Santamaria, logra el tercero y faltando seis minutos para el final, Vidal, nuevamente, logra el cuarto.

De este partido, podemos destacar, la selección de cuatro jugadores del Juvenil Astillero, Pepín, Tomás, Vidal y Campín.












viernes, 8 de febrero de 2019

UNION CLUB Juvenil - Nueva Montaña - 3 abril de 1955




(foto cedida por el ex-portero Pepín)



Pepin - Quintana - Cueto - Tomas - Vidal - Demetrio Gómez
Gento II - Machi - Argos - Cagigal - Campín.




El domingo 3 de abril de 1955, se celebró el encuentro entre el Astillero juvenil y el Nueva Montaña, en los campos de Nueva Montaña.


El partido terminó con el resultado de dos a cero, a favor de los astillerenses y con este triunfo se colocaron primeros en la clasificación del Campeonato regional juvenil.

El Nueva Montaña se tuvo que presentarse con un equipo de circunstancias, debido a tener jugadores sancionados y por ello, los astillerenses sin merecerlo consiguieron el triunfo.

En el encuentro se lesionó el portero Pepín, por un encontronazo con un jugador contrario, que sería el astillerense Tito Garcia Vega, que defendía en esas fechas la camiseta del Montaña.

En este campeonato regional participaron los equipos juveniles del J.R. Santander, J. Astillero, J. Rayo, Reinosa, Vincitor y Nueva Montaña.

Quedó campeón el Infantil del Racing y los equipos del J. Astillero y J. Rayo, se clasificaron para el campeonato de España.













viernes, 1 de febrero de 2019

ASTILLERO las primeras casas









En un documento fechada en la "Nueva Población de Astillero de Guarnizo", el 9 de diciembre de 1790, se decía:

"....que hace más de medio siglo que el territorio donde se situó dicho astillero, no tenia casas ni habitación alguna, hasta que, con motivo de haberse elegido para la construcción de navíos, se fabricaron tres casas por cuenta de V.R.P. (Vuestra Real Persona -era un documento dirigido nada menos que al Rey-) que sirvieron de hospedaje del comisario de Marina y otros dependientes de ella, pero, desde luego, se fue poblando".

Cuando el célebre don Antonio Gaztañeta, por mandato del omnipotente ministro Patiño, se desplazó a Guarnizo para poner nuevamente en marcha su viejo astillero y habilitarlo para construir en él fragatas y navíos, como así ocurrió, máximo exponente del poderío naval de aquella época, el Monte Marítimo de Guarnizo era un frondoso bosque de álamos, robles y cajigas, solamente hollado su suelo por algún que otro cazador y pescadores de ocasión.

En esas condiciones, Gaztañeta situó las gradas en la zona tradicional, exactamente en el lugar ocupado hoy por la central de transformación de energía eléctrica de la Electra de Viesgo, S.A., y en lo que hoy es la localidad de Astillero, edificó para la Maestranza y personal que lo inauguró las tres casas de que nos habla el documento citado al principio.

Estas tres casas eran:

Primera, la que estaba situada en la parte oeste del Grupo Escolar de la Planchada, separados ambos edificios por la calle de Tomás Bretón. Fue demolida, por encontrarse en ruina, por el año 1950 y sobre su solar y finca anexa se han edificado recientemente grupo de viviendas.

Fue la segunda, la que después se denominó "Casa de los Comandantes", sin duda porque se alojaban en ella. Estaba situada en la calle San José y fue derruida a finales del siglo pasado, para construir sobre su solar otro edificio al gusto de la época. La casa original tenia entrada por la calle San José y por la calle de Churruca; hoy la tienen solamente por la calle de San José y lleva el número 17.

La tercera y última casa estaba situada en la actual calle del Generalísimo, esquina a la citada calle y a la Travesía de Orense. Fue su último inquilino la familia del doctor Ezquerra y ha sido derruida muy recientemente por su propietario, don Ignacio Vega Gorostegui, quien ha cedido graciosamente la mayor parte de su solar al Municipio para calle de dominio público y sobre su huerta acaba de construir el mencionado señor un grupo de viviendas para el personal de su empresa.

A la vez que estas viviendas, construyó Gaztañeta un gran edificio que se denominó "La Casa del Rey" y últimamente "El Colegio", pero Gaztañeta construyó solamente el pabellón orientado este-oeste, ya que anexo y perpendicular a él se construyó otro más tarde, en el año 1746, siendo director del Astillero, don Roque Martinez Herrera, marqués de Conquista Real. Ha sido demolido este año 1972 para construir sobre su solar un gran edificio de viviendas.

Otro gran almacén, de cerca de cien metros de longitud, construyó en la calle San José. Fue derruido por el año 1880 para construir sobre una parte de su solar el actual edificio del Ayuntamiento.

Finalmente, construyó en la parte este del Colegio la capilla de San José, pequeñita, adecuada a la escasa población que iba a cobijar. Esta capilla se amplió en el año 1747 por el que entonces dirigía el Astillero. Se derribó y se construyó otra en el mismo lugar, de planta octogonal, en el año 1890, la que a su vez fue demolida para construir otra mucho mayor que se inauguró en el año 1949, que es la que se conoce.

Es de advertir que estos edificios, que constituyeron con el tiempo el arranque de las principales calles de la localidad, no los conocimos, tal como los construyó Gaztañeta, pues por la acción del tiempo habrían desaparecido ya hace muchos años.

Las tres casas, pues, originales de Gaztañeta, sus almacenes y capilla, han desaparecido totalmente 

Es realmente triste que de aquel incipiente astillero de hace exactamente 250 años, noble cuna del Astillero actual, no exista una inscripción, una modesta lápida que lo recuerde; solamente la Minerva que a la entrada de uno de los edificios figuraba como adorno secular y que el mencionado señor Vega Gorostegui dono a la Diputación Provincial de Santander para que figurase, una vez restaurada, en el Museo Provincial.

(habrá que investigar que fue de esta placa)