viernes, 31 de marzo de 2017

UNION CLUB-Racing Club 10 febrero 1927








El 10 de febrero de 1927, se jugó en los campos de Astillero, el encuentro entre el Unión Club de Astillero y el Racing Club de Santander.

Este encuentro correspondía al Campeonato Regional de Cantabria, Serie E.

En este partido sirvió para reflejar la superioridad tan considerable del equipo campeón santanderino sobre todos los restantes que en la región integraban la primera categoría regional.

Fueron nada menos que diez goles, los que marcaron el equipo racinguista, con total dominio en el juego.

El Racing se impuso con jugadas en las que era de admirar la técnica y dominio sobre el juego que practicaron durante todo el partido los santanderinos.

Los astillerenses muy desorientados terminaron derrotados ampliamente.

Los santanderinos jugaron con la falta de Gómez Acebo en la línea de ataque, que había sido reemplazado por Ramón Santiuste, cubriendo Angulo el puesto de defensa.

Esta modificación que sorprendió a los aficionados, no tanto en la actuación de "Cachano" que cumplió como si hubiera estado jugando de siempre de interior izquierda, además de haber conseguido un tanto, muy bonito.

En el Unión Club se presento con algunas ausencias en la alineación. Faltaba Montoya en la defensa y esta fué una de las líneas que se mostró la más débil.

Tampoco pudieron alinearse Salas ni Furty.

De entre los jugadores del Racing destaco sobre todos, Amós Torriente. De este jugador hacía tiempo que no se le había visto jugar con tanta precisión y con el acierto que tuvo en este partido. El cuarto y el quinto fueron conseguidos por él.

Si el primero sorprendió por la rapidez de su ejecución, el que poco después conseguiría fue una maravilla por la destreza y habilidad que lo ejecutó.

Fué uno de los tantos más bonito de la tarde.

Se terminó el encuentro con un resultado rotundo de diez goles a uno, a favor del Racing Club.

La afición, a pesar de ser un día laborable, asistió en gran número y que soportaron con resignación la  lluvia.

Entre los espectadores, el fotógrafo "Samot" pudo recoger con su máquina, una foto de un grupo de lindas astillerenses que se encontraban presenciando el encuentro.

Los goles fueron marcados:

El primero a los cinco minutos, por Oscar, en un rechace del guardameta Arteche.

El segundo lo consiguió nuevamente Oscar al castigar una falta de Peña.

El tercero fue el último del primer tiempo y volvió a marcar Oscar, que remató un pase Torón.

En la segunda parte, el cuarto Amós Torriente y después el quinto este mismo jugador.

El sexto fue obra de Ramón Santiuste. El séptimo y octavo fueron conseguidos por Hernández.

El noveno fue por motivo de una falta que Oscar castiga y el balón terminar por entrar directamente.

El décimo, último del encuentro, lo consiguió el goleador Oscar al rematar una pase de Santiuste.

En el intervalo del sexto al séptimo, los astillerenses consiguieron marcar el gol de honor, por mediación de Iraegui.

El arbitraje del colegiado, señor Alejandro Quintana, fue acertada. Tuvo interpretaciones técnicas hechas con muy buen sentido y fiel observación de las reglas del juego.

El Racing Club: Raba; Angulo, Naveda; Yllera, Prieto, R. Gacituaga; Torón, Hernández, Oscar, Santiuste y Amós.










sábado, 25 de marzo de 2017

FELIPE MURIEDAS FOX de Villanueva de Villaescusa




(foto cedida por Luis Felipe Muriedas Hernández)

Casa de don Felipe Muriedas Fox en Villanueva de Villaescusa. En una de las visitas de don Emilio Calleja Isasi.



Don Felipe Muriedas Fox



De este ilustre personaje, D. FELIPE MURIEDAS FOX, deseo hacer una publicación, a pesar de que no tenía relación con Astillero, pero si con Guarnizo, como después redactaré.

Don Felipe Muriedas, falleció el 16 de diciembre de 1907, en el Estado San Luis de Potosí, en  México, a la edad de 74 años, cuando acababa de regresar de un viaje por Europa en compañía de sus hijos, después de haber permanecido en su pueblo Villanueva de Villaescusa, gran parte de ese verano de 1907.

El excelentísimo señor D. Felipe Muriedas, era una de las personas más prestigiosas de la República Mexicana, no sólo por su posición social, sino también por su carácter afable y sus sentimientos religiosos y caritativos.

Salió de su pueblo, Villanueva de Villaescusa, a los trece años de edad y consiguió, con su honradez y aplicación al trabajo, llegar a ser una figura muy notable en el mundo de los negocios.

No hace mucho tiempo publicaron en una importante revista mexicana, una detallada información de la hacienda de Gogorrón y Anexas en el Estado de San Luis de Potosí, con más de 200 caballerías de tierra de labor, propiedad del señor Muriedas. Más de 300.000 pesos invertidos en poco tiempo para resolver el problema de la irrigación, prueba de la importancia de aquella hacienda, notable por sus cosechas de trigo y maíz, así como por su establo de vacas, fabricación de queso y  vino mezcal, etc.

Lo más notable de esta finca según decía la revista era la fábrica de tejidos de lana que fundó su propietario. En esos años 1907, era una de las contadísimas fábricas de lana que desde su fundación ,ha marchado sin interrupción alguna, debido a la fe inquebrantable con que la sostuvo su dueño en las más agudas crisis por las que atravesó esta industria.

En un modesto establecimiento titulado La Palestina, se dio origen al desarrollo y engrandecimiento de la importante casa Muriedas de San Luis Potosi.








La Palestina, almacén de tejidos nacionales y extranjeros y casa de banca, era la casa matriz de tan conocida firma.

La importante fábrica San Felipe, situada en la hermosa hacienda de Gogorrón, era uno de los negocios que con más cariño atendía el señor Muriedas por las circunstancias especiales en que había sido planteada esta industria, orgullo y riqueza de la región en que se encontraba.

La hacienda de Gogorrón, se encontraba a poca distancia de la estación Villa de Reyes, en el ferrocarril Nacional Mexicano, y por vía férrea, propiedad también de la casa Muriedas, para el servicio de la que tenia instalado su dueño, magníficos tranvías y plataformas que transportaban todos los productos de dicha hacienda y de la fábrica San Felipe, a la estación del Ferrocarril Nacional.

Media una gran propiedad rústica con una superficie de 21 sitios de ganado mayor ó sea otras tantas leguas cuadradas; en su extenso territorio tenia lo que se llamaban ranchos o estancias, y son los de Rosario (con 800 habitantes); Machado (100 habitantes); Crucillo (300 habitantes); Zavala (con 200); Sacabón (150 habitantes); Tejocoto (50 habitantes); Oruelas (20 habitantes) y Gogorrón con 1.500 habitantes aproximadamente. Reunía en conjunto la hacienda unos 3.000 habitantes, cuya vida consistía en los negocios desarrollados en la misma.

Se cultivaban  toda clase de legumbres en las extensas huertas , sombreadas por innumerables árboles frutales y regadas por las presas y depósitos para el agua y estanques.

También en sus dilatados campos había grandes siembras de chilar, trigo, maíz, cebada y frijol; cultivos de maguey para la fabricación de vino mezcal, cuyo producto se obtenía con la instalación de alambiques, hornos, etc., construidos en la misma hacienda de Gogorrón y que producían diariamente de 100 a 150 decalitros de ese liquido.

En el recinto de la hacienda, existía un almacén de abarrotes, una curtiduría y talabartería, fábrica de queso y manteca de vaca, una escuela elemental para niños y niñas, una iglesia, una botica atendida por un médico, etc. y todo lo necesario para una población de 3.000 personas.

Pastan en los montes varios miles de cabezas de ganado de todas clases, de lana, de cerca, caballar, mular, de corral y vacuno.
La incansable labor y el amor en progresar del señor Muriedas, eran tales, que además poseía otras fincas de gran importancia en haciendas y propiedades urbanas, era propietario del conocido ferrocarril de Vanegas, Cedral y Matehuala.

Comerciante infatigable y honradísimo, decía la misma revista, el señor Muriedas formó uno de los primeros capitales de San Luis y seria difícil calcular a cuánto ascendería lo que invirtió en sus generosidades y obras de beneficencias.

A su iniciativa se debió la fundación de la sociedad contratista del abastecimiento de aguas de la ciudad.

Sus obras de caridad habían sido verdaderamente importantes. Regaló a la Beneficencia española de San Luis el edificio que por esas fechas ocupaba. Sostenía también por su cuenta el Asilo de pobres en la misma ciudad, mereciendo que el Gobierno español le honrara con la Cruz de Beneficencia de primera clase.

En sus frecuentes viajes a su pueblo natal siempre dejó algún grato recuerdo de su generosidad. Restauró la Iglesia parroquial de Villanueva y en ese año 1907 completó con su importante edificio la institución que las religiosas Trinitarias tenían en el mismo pueblo para que fuese  más eficaz su obra educadora.

Además, tanto aquí como en México, era el sostén de su familia y de otros muchos necesitados, uniendo a su generosidad el afecto hacia los socorridos, que hacía más eficaz el beneficio.

A estas excelentes cualidades unió la más importante, conservar siempre viva ,la fe religiosa y conducirse en toda su vida como un ferviente católico, no contentándose con practicar la religión en privado, sino procurando que cuantos dependían de él, en sus vastas posesiones e industrias, vivieran cristianamente.

Por su cuenta se daban misiones en sus fincas y se ponían en práctica todos los medios que sabían emplear los patronos que sienten y obran en cristiano.

Por su fallecimiento, se celebraron los funerales en la Parroquia de San Juan Bautista, de Villanueva de Villaescusa, el lunes 23 de diciembre de 1907.







Don Felipe Muriedas, se relacionaba y mantenía una gran amistad con el General, don Emilio Calleja Isasi de Guarnizo.

Ambos personajes, se visitaban en sus casas de veraneo, tanto en Villanueva de Villaescusa como en la de Guarnizo.

Después de conocer un poco la biografía del señor don Felipe Muriedas Fox, me extraña que no exista en nuestra tierra, ninguna publicación de él o se halla reconocido su labor beneficiadora. Pues considero que debió ser una persona muy relevante en México, como en su pueblo natal, Villanueva de Villaescusa.

Quiero agradecer públicamente, a don Luis Felipe Muriedas Hernández, en darme a conocer la historia de su antepasado, don Felipe Muriedas Fox.







sábado, 18 de marzo de 2017

PONTEJOS equipo de fútbol femenino 1932










El 24 de marzo de 1963, el Diario Alerta a través de su corresponsal, Mann Sierra, publicaba una interesante noticia sobre el pueblo de Pontejos.

El titulo: Pontejos fue (en 1932) el primer lugar de España en que hubo un equipo femenino de fútbol.

Para conocer algo más sobre ese equipo, Mann Sierra se entrevistó con la señora Ascensión Diez Añorga, quien había formado en él,  por aquellas fechas.

En fechas de 1963, se había comentado en la prensa deportiva de un encuentro de futbol jugado por mujeres en Galicia.

El periodista Mann Sierra se llegó a Pontejos para informarse y a través de Dini, la tendera del pueblo, le explicó: "Aquí, en Pontejos, hubo futbol de mujeres cuando aquellas de Galicia apenas si habían nacido".

Pero quien mejor tenía conocimiento era en la barbería de Santiago, quien guardaba un recorte de un periódico de Madrid con "foto" y todo, que lo atestiguaba.

Pontejos fue el primer pueblo de España que practicó el fútbol femenino, mientras no se demuestrase lo contrario. Fue en el año 1932.

Para mejor confirmarlo era hablar con  una de las protagonista de ese equipo, Ascensión Diez Añorga.

Quien hablo de ello:

" Recordaba que por esas fechas , el Pontejos, estaba militando en la categoría C de las competiciones regionales y las chicas del pueblo sentían una gran pasión loca por el fútbol y por su equipo. Iban con él a todas las partes donde jugaban, unas veces en autobús y otras en barca.

Era un sentir en el alma por los colores de su club, animar, bien perdieran o ganaran. Recordaba un día, en San Salvador, que no es para contarlo, hasta la fuerza pública se vio desarmada. Habían ido en barca, ría arriba.

La iniciativa de formar un equipo, fue, cuando una tarde los hombres se encontraban en sus trabajos, nosotras puestas de acuerdo, les cogimos sus equipajes, se vistieron con ellos y, ni cortas ni perezosas saltaron al campo a disputar un partido.

El equipo contrario, era una selección española, de once chicas que estaban sirviendo en Pedrosa, procedentes de otros lugares de España.

El partido no se llegó a terminar, pues nada más que llegar los hombres, se dió por suspendido el encuentro.

El equipo quedó formado, pero no encontraban contrincantes para enfrentarse a ellas.

Parece ser que también Pontejos, hubo un partido de solteras y casadas por el año 28., pero el primer equipo de mujeres que hubo en España fuimos nosotras. "

Por entonces el equipo lo formaban: Soledad Bedia, Antonia Bedia, Isabel Simal, Concha Sauquillo (de Elechas), Ascensión Diez, Regina Cavada, Celedonia Ladislao, Antonia Ruiz, Nieves Gómez, Mercedes Ladislao y Lina.

Cuando se manifiesta que es el Pontejos, el primer equipo femenino en España, no parece ser así.

En 1914, existió un primer equipo en Barcelona, el Spanish Girl's Club. Se cree que el 9 de junio de 1914, se disputó el primer partido de fútbol femenino en España del que se tiene constancia. Disputado en el Velódromo Parque de Deportes, el Montserrat y el Giralda (pertenecientes ambos al Spanish Girl's Club) y diferenciándose en el color de sus camisas, jugaron en beneficio de la Federación Femenina contra la Tuberculosis finalizando el encuentro por 1-2.

La señora Ascensión Diez Añorga, vive actualmente y supera los 100 años de edad.















sábado, 11 de marzo de 2017

viernes, 3 de marzo de 2017

PONTEJOS campo de aviación (II)







Archivo Histórico del Ejercito del Aire - AHEA








En la fecha 11 de octubre de 2015, hice una publicación sobre el campo de aviación de Pontejos.

Ahora, quiero, ampliar más esa publicación, incorporando unos croquis del aeródromo  localizados en el Archivo Histórico del Ejército del Aire - AHEA que creo que es de mucho interés.