Unión Club, de Astillero - año 1931
El
Campeonato Regional de Segunda Categoría B, correspondiente a la temporada
1931-1932, participaron los equipos Unión Montañesa, Deportivo Torrelavega, Tetuán
F.C., Deportivo Naval, Barreda Sport, Cultural de Guarnizo y Unión Club de
Astillero.
El día 23 de
noviembre de 1931, se jugó el encuentro entre el Unión Club y el Deportivo
Naval, en los campos de Astillero, con el resultado de 1-2 a favor de los
visitantes.
El partido
dio comienzo a las tres de la tarde y arbitrado por el colegiado señor Celestino
Rodriguez, acompañado por los jueces de línea, señores Rivero y Arce. Delegado
federativo, señor Simón (F).
De este
encuentro, tuvo un enlace triste por los acontecimientos que se produjeron y
más en lo deportivo, al sufrir los astillerense una derrota inmerecida.
Todo por la
injusticia del árbitro, señor Celestino Rodriguez, al dejar sin señalizar tres
penaltis a favor de los locales y con el consiguiente, de que el publico
exteriorizó ruidosamente su protesta y no ocurrió algo más grave, en parte, por
la conducta de una mayoría de aficionados que asistieron al encuentro.
En lo
deportivo, hubo que reconocer que el Naval jugó mucho mejor en la primera
parte, consiguiendo su primer gol.
En la
segunda, fueron los astillerenses que dominaron, pero volvieron a marcar el
segundo y a los pocos minutos recortaría el resultado, al marcar Hilario.
Días después
de ese encuentro, se reunieron los miembros del Comité de la Federación
Cántabra, para tratar de los incidentes ocurridos a la terminación del partido
celebrado en Astillero.
A tal
efecto, se requirió al árbitro como al delegado de esa Federación que había
asistido para ampliar la información que constaba en las actas correspondientes,
lamentando profundamente ese Comité, no sólo la agresión que se le hizo victima
en la estación de Astillero y en la de Maliaño, por desconocidos entre la
multitud y en la obscuridad, sino también las graves ofensas de que fue objeto
el árbitro por parte de algunos jugadores y nadie podía disculparse ante esas
incidentes.
En virtud de
ello, se tomaron los siguientes acuerdos:
Al jugador
Alejandro Mata, que fue el que más se distinguió en ofender gravemente al
árbitro y al delegado de esa Federación, se le inhabilitó para tomar parte en
lo que restaba del campeonato, haciendo uso de las facultades conferidas en los
artículos 81, 86 y 100 del Reglamento.
A los
jugadores Manuel Tamayo, Alfredo Molinuevo e Hilario Garcia, dos semanas de
suspensión, por ofensas al árbitro y al delegado, en virtud de las mismas
atribuciones.
También se
acordó hacer constar, en acta la satisfacción ejemplar, deportiva y caballerosa
conducta del capitán, TOMAS BENAVENTE, que, sin perjuicio de hacer la protesta
que estimó oportuna, supo no sólo respetar las personas, sino prestarlas su más
decidido apoyo.
Iguales
manifestaciones en hacer con referencia a los directivos del Unión Club, don
Luis Garcia y don José Navarro, que actuaban de delegados del Club en el partido
y que hicieron cuanto a su alcance estuvo por evitar los incidentes ocurridos y
en todo momento prestaron, tanto al árbitro como al delegado, su más decidido
apoyo, lo que permitieron el uso de la facultad que les concede el articulo 97
para no aplicar sanción alguna al campo en casos como el que se presentaba.
No tiene
explicación que el señor Celestino Rodriguez, de los tres penalti que ignoró en
la área del Naval, al menos, haber pitado alguno de los tres y hubiera evitado
el monumental disgusto de la afición astillerense.
Y todavía,
con más motivos, cuando este árbitro en el encuentro Athetic de Bilbao y Levante
en San Mamés, tuvo la valentía de pintar tres penalti.
Ese partido
se jugó el 4 de mayo de 1947, y el Athetic de Bilbao jugaron Lezama, Fernández,
Oceja. Celaya, Nando, Barrenetxea, Iriondo, Panizo, Zarra, Iraragorri y Gainza.
También hay
que decir que este arbitro cántabro, tuvo una brillante historial deportivo.
Celestino Rodriguez